viernes, enero 20, 2012

Economía e Ingeniería, coordinadas andarían bien.

Introducción.
La idea de este trabajo no es bajo ningún punto de vista dar alguna clase de enseñanza de economía.
Para ellos están los especialistas en el tema. Intentaré solamente decir con palabras comunes lo que entiendo se debería lograr para desenmarañar la problemática actual.
Sí como la contabilidad y control es cosa de contadores, la economía no. Por más que los títulos de licenciado en economía y contador pareciera son de actividades próximas no están preparados para lo mismo.
Entiendo que los contadores tienen suficiente trabajo con su tarea de contabilidad y control. Aunque la tarea de contabilizar propiamente dicha la deberían poder hacerlo como el respirar más o menos, es un decir por ser una cosa de todos los días de ellos.
El trabajo más arduo de un contador debería ser el control, que no es lo mismo que auditoria, menos aun control fiscal, es algo distinto, ya veremos.
Pareciera que lo que debería controlar el contador es el movimiento en las cuentas contables con el objetivo de zafar el control fiscal justamente y, tanto se esmeran los contadores en dicha especialización que su utilización es necesaria solo cuando hay exigencia legal o…, es necesario esquivar el fisco.
En este caso siempre deberá contar además con la anuencia de otro profesional, asesor en leyes penales. Existen estudios jurídicos contables. Estos profesionales trabajan en conjunto, por algo será.
Pero bueno, el tema ahora no es este. Es la economía.

Movimiento.

Entiendo que la economía pasa más que nada por la política. Está relacionado con la estadística pero por más que parezca que haya muchas cuentas y números a controlar y, dadas las situaciones angustiantes, hay más necesidad de políticos buenos que de contadores y/o licenciados.
Hay teorías, una muy discutida es la que publicó Marx mencionando la finalización del capitalismo.
Quizás no sea así, no entiendo mucho pero si ya sucedieron situaciones críticas en más de una oportunidad en 1929 y 2009, muchos hablaron de la finalización del capitalismo y seguimos en la misma, cabe una duda.
Considero no debe ser así (finalizar el capitalismo) porque desde abajo, nosotros mismos, alimentamos con la energía necesaria para que el permanezca así tal cual lo conocemos.
La economía es algo que se mueve, tiene vida, produce y vende.
Si no hubiese producción no habría economía, si no hubiese quien compre no había producción y así se entra en un círculo que parece vicioso, con explosiones de crisis cíclicas.
Este círculo se parece a las burbujas que hacemos soplando jabón, va creciendo y luego explota tal como lo esperamos. La diferencia es que en economía la crisis es una explosión inesperada por la mayoría.
Hay teorías explicativas en uno y otro sentido pero no salimos de la situación cíclica.
El obrero produce y compra. Es decir que el que compra lo hecho es el mismo obrero. Si el obrero no se pudiese comprar el empresario no debería haber producido pero nadie lo previno y estamos todos juntos en una encerrona. Cuando sucede esto, estamos frente a una crisis económica que nadie entiende.
Es algo que para poder entenderlo lo podríamos relacionar hasta con la naturaleza y la ecología.
La naturaleza es ecológica reciclable en todo su conjunto, se dice: El águila vuela tranquilo en el cielo porque sabe que la hormiga está caminando en la tierra. Salvando las diferencias el empresario haría el águila y el trabajador de hormiga.
Los dos se necesitan pero están necesariamente enfrentados en una lucha de clases. Cada uno en su interior, sabe perfectamente que la subsistencia de uno está en el otro.
Suceden crisis, y vuelve a suceder lo anterior, se suceden con más controles pero a la larga seguimos en la misma. Es entonces que podemos decir que es cíclico…, es como la naturaleza, es reciclable.

Plusvalía

Veamos un análisis sencillo de lo que se dio en llamar plusvalía. Diferencia entre el valor del trabajo y el salario propiamente dicho.
Analiza que si el obrero necesita 5 hs., de trabajo para la subsistencia y trabaja 10 Hs. La diferencia de pago (5 Hs.) es la plusvalía y, ésta, en teoría se asigna como ganancia “plus” al empresario.
Con un criterio bondadoso podría decirse: El empresario siempre estará tratando de asegurar al obrero su nivel de subsistencia, no puede darse el gusto de perder un obrero que le está dando ganancia. Pero así también no dará al obrero un céntimo más que eso y nada más que por eso (lo cual lo convierte en alguien que para nada es bondadoso). Está tratando así de impedir la naturaleza propia del hombre “mejorar su nivel de vida”. Entiendo que si el empresario le da más al obrero es solo porque teme que la competencia se lo lleve. Pero suceda lo que suceda el empresario es empresario y el obrero es obrero, por más que sea CEO.
El obrero solo podrá mejorar su nivel de vida, escalón a escalón, si hay libre competencia.
Bueno, la teoría de MARX dice que el obrero necesita 5 Hs., para subsistir pero trabaja 10, entiéndase bien, trabaja 10 Hs. Pero cobra por 5 Hs. Las otras 5 Hs. Es la plusvalía, ganancia extra del empresario.
Lo que se manifiesta el manifiesto justamente es eso. El empresario busca mantener el nivel de salario lo más bajo posible (cercano a la subsistencia) y una jornada laboral lo más larga posible.
Lo anterior, por supuesto, produce resistencia y genera la lucha de clases.
Con este esquema muy pobre seremos.
Veremos algunos puntos clave de entendimiento y luego seguiremos con este análisis de la lucha de clases.

Productividad.

Se dio en llamar productividad a otro esquema que permite aumentar beneficios al empresariado. Es un proceso de reingeniería que permite, de alguna manera, producir más con lo mismo.
Pero entiéndase bien es mayor ganancia por mayor ventas (a menor, igual o mayor precio) pero con menor costo de producción. Pasa que generalmente es mal interpretado, no necesariamente ejecutada por ingenieros.
Los empresarios, con la grafica dibujada en datos aportados por profesionales de economía y / o contadores la llevan a otro sentido que desvirtúa la excelente teoría de ingeniería.
Producir más con lo mismo, no es igual a producir lo mismo con menos, dejando obreros en la calle.
Siempre se está tratando de producir más con menos. Es el efecto contraproducente que no representa pero se confunde con la productividad.
Esto se da así con la constante evolución de las empresas industriales modernizadas con máquinas de última generación.

El hombre y la tecnología.

Es algo natural en el hombre. Él hombre trata de mejorar su estándar de vida, no solo ganando un mejor salario, si no que si se da que razona sobre lo echo para mejorar (tecnología) superando escollos técnicos que permiten máquinas que producen mas y mas rápido. No necesariamente con lo mismo pero si, con buen sentido.
Se entabla entonces una carrera de producir máquinas de mayor capacidad y mayor velocidad.

El equilibrio.

Ahora está presente entonces el análisis del hecho de no poder establecer un equilibrio.  
En el buen criterio la evolución técnica involucra una máquina que pueda producir más. Situación necesaria por la mayor demanda dada por la creciente población que consume cada vez más.

Costos de producción

Con respecto a los costos de producción de esta máquina moderna. Manteniendo constantes todos los otros parámetros que puedan incurrir en su análisis. Al producir más, el precio por unidad será menor, en el infinito el precio debería ser cero (se menciona para interpretar mejor).
El empresario debería bajar el precio del producto, pero no…, la economía de mercado no lo deja.
Es como que para el empresario, que debe fijar el precio, siempre que sea posible y, hasta parece necesario debe ganar más, no se establece un límite para el empresario. Reitero el obrero siempre debe ganar lo menos posible, pero en este caso si hay un límite “teórico” que es justamente la subsistencia.  Pero bueno…
Si a lo anterior le sumamos una variable mas, muy común y reconocida (aunque no muy cierta desde el punto de vista de la ingeniería). Las maquinas más modernas, que produce más, necesita menos obreros.
Se compra una máquina moderna para reducir obreros y…, si larga obreros a la calle, algo no está bien.
Parece ser que en este caso, lo que se persigue es que el empresario tenga doble ganancia, menor costo de producto unitario y menor gasto en obreros. No es tan así y está ampliamente analizado pero seguimos en la misma y caemos de una crisis en otra, sin poder encontrar aun la manera de poner límites en todos los sentidos.

Reducción de costos.

Aunque en economía se lo llame “mantener la tasa de beneficios” se entiende “de los empresarios”, hay que entender claramente este tema. Insisto en este punto del empresariado,  ellos no lo dudan, en cuanto sea posible, ni se molestan en mal interpretar, para ellos es como se demostró más arriba, en sí, tratarán siempre de aumentar la tasa de beneficios, ganar más.
Si algún problema obliga al empresario a reducir costos. En todo sentido, con todos los sentidos del empresariado, para ellos está claro, lo primero que van a intentar bajar son los gastos de producción.
Existen estudios muy elocuentes de economía que se pueden practicar. Se llaman análisis de demanda y elasticidad de la demanda que fácilmente pueden demostrar la posibilidad y en algunos casos la “necesidad” de bajar los precios para poder ganar más inclusive, o al menos solo mantenerse.
Pero se da que es como un casete fijado en la mente, el hecho de que solo se puede ganar más gastando menos y, al menos yo, creo que no es así. No va con el mecanismo de la demanda usado en un mercado de libre competencia. Entra en un círculo vicioso del cual los empresarios mismos luego buscan la salida sin poder hallarla sucintándose entonces en algún momento una explosión que genera la crisis y recién allí se produce la ruptura del círculo vicioso.  Solo para volver a comenzar.

No hay crisis final.

Por lo dichos anteriores es que no estoy de acuerdo con los dichos de Marx de que todo conduce a una crisis final del capitalismo. Es algo cíclico. Llega un momento en el que zafa del círculo vicioso con alguna crisis como las del ‘29 o del ’09 y vuelve a comenzar con lo que todos queremos, lo que deseamos como ser humano, poder mejorar el mundo imperfecto para poder llegar finalmente a la gloria del hombre y disfrutar de la vida.

Religiones.

No se habla de pobreza y riqueza si no de la necesidad de poder contar con las mismas probabilidades de superación que cualquiera de nosotros. Cualquier persona por más pobre de recursos que sea, se siente feliz en un mundo libre con posibilidades de mejorar e intentará por todos los medios de mantener lo que considera su libertad y su propiedad. 
Lo que vemos queremos, deseamos, naturalmente, es tan preciado como nosotros lo somos tan egoístas.
Si combinamos esto con los dichos de los referentes de la religión católica, que intento seguir. Que se hizo tan poderosa económicamente como políticamente, parece ser la mayor empresa y por sobre todo la que cuenta con la mayor plusvalía, tanto que no se da cuenta aun que su propio pregonar le quita cada vez más adeptos. 
En Argentina las religiones cristianas pregonan el amor en la familia con un criterio Cristo-céntrico con carácter maternalista, marianista (en el caso de la religión Católica). Interpretado a la madre como protectora de los suyos.

El egoísmo.

Se da que así nos formamos egoístas para los de afuera, ya que es necesario interpretar esta falta de amor por los demás de la comunidad y se entiende que se da que el amor que nace en el hogar…, también muere en el hogar y así no puede existir, no hay solidaridad que valga.
Por más que a viva voz lo soliciten, los gritos salen solo de la boca para afuera. No existe el verdadero amor por el prójimo. No lo pregonan de la familia para afuera porque se considera que desmembraría todo lo que en su vida construyeron. Aunque por definición de solidaridad se interprete como amor fuera del hogar, ellos sientan las bases en el hogar y por más que la economía mundial se esté desmembrando con cada crisis destruyendo muchos hogares con su accionar, no se dan cuenta.
La revolución industrial saco al padre / madre del hogar para encerrarlo entre cuatro paredes el mayor tiempo posible, pagando por su labor la menor cantidad posible, que tan solo permita la subsistencia de la familia.
Como con esto ya no alcanza, debe salir la segunda persona del hogar a buscar trabajo o hasta un tercero en algún caso. En muchos casos los hijos menores, niños, trabajan.
No se dan cuenta que así realmente se está desmembrando el hogar llevándolo al círculo vicioso “a todos juntos”, para que ellos, como ya lo mencioné, están del lado del empresariado.
Se llega así a la siguiente generación prácticamente desatendida en el hogar, es malo y de lo malo no sale nada bueno, hay que revertir. Por el egoísmo actúan sin considerar lo que se anuncia como bueno respecto a la familia.
Por otro lado están economistas muy escuchados / leídos que dicen que este egoísmo que tanto mal trae aparejado es algo bueno para la economía tan solo porque permite mejorar la situación económica y social que busca maximizar el hombre en sociedad.
Siendo que realmente resulta todo lo contrario. A mis hijos les digo, nadie te va a dar de comer gratis. Yo siempre recuero lo que decía un amigo. Tengo suerte de haber nacido después que mi padre, de lo contrario me hubiese muerto de hambre.

Seguimos igual.

Ahora pareciera que lo que es cíclico seguirá cíclico, ya reiteradas, ´29, ´09. Así también los que pronostican la finalización del capitalismo se seguirían equivocando, los trabajadores seguirán trabajando por su salario, los empresarios seguirán pagando lo menos posible por muchos, muchos años más.
Para la próxima crisis ya no estaré, pero si perduran mis escritos alguien se acordará en mi memoria como un intento de subsanar la economía de un mundo imperfecto.
Lo que se ve alentador es la productividad bien entendida. Digo bien entendida porque como ya lo mencioné es mal interpretada y por lo tanto mal aplicada. No es así como se debe trabajar.
Para las empresas en este caso de la productividad tanto como en la innovación que ya mencione en otros artículos deberían mencionarse en los artículos como de pura y exclusiva responsabilidad de profesionales de la ingeniería. Ellos están preparados para dichas funciones. No así los contadores, abogados ni sus susodichos similares. Ya me he explayado al respecto en otro artículo escrito pero no es suficiente.
No hay convicción aun de esta nefasta situación a la que se llega periódicamente por fallar en algo. Pero se ve una luz al final de túnel. Entiendo que se podría salir del círculo vicioso sin necesidad de entrar en crisis cíclicas que da lugar al estado de empobrecimiento progresivo de la clase obrera, conocido paupérrimo.  Mientras que algunos de los empresarios van en el sentido contrario.
Propuesta.
Pasa que en cada acto, todos los actores juegan en contra de todos.
Veamos: Si llamamos capital fijo al que tiene el empresario para producir y, capital variable al pago de los salarios para producir. Podemos relacionar ambos de la siguiente forma.
El capital fijo sabemos que es capital es “trabajo acumulado” trabajo anterior del obrero por un salario. O sea, si volvemos a la relación trabajo / salario. Esto aumenta la plusvalía, se beneficia más al empresario, empobrece más al obrero, cada vez con más fuerza.

 Veamos un cambio desde otra óptica.

1.       Si existe mucho salario, también existe mucha plusvalía, mucho beneficio para el empresariado que por siempre tratará de mantener mayores beneficios (por más que digan que se trata de “mantener” la tasa de beneficios). 
2.       Si por medio de la mal entendida productividad y / o tratando de reducir costos, se disminuye la masa obrera (lanzan gente a la calle) también, por supuesto, disminuirá la plusvalía, por lo que también disminuirá la ganancia del empresariado. Y, si a este punto dos acumulamos lo indicado en el punto uno respecto a la tasa de beneficios notamos como se acrecienta el criterio paupérrimo, mas pobres aun los obreros.
3.       Si el paupérrimo pobre obrero cada vez gana menos, por supuesto, cada vez comprará menos, por lo que las empresas deberán producir cada vez menos. Pero, se sigue aplicando el punto uno hasta que todo explota. Al llegar a esta situación, el obrero está por debajo de la línea de la indigencia mientras que el empresario que queda de pié se hace cada vez más rico.
Se nota que aquel que logra acumular riqueza, no todos lo logran, algunas personas pasan de empresario a obrero, pero en economía se estudia la forma de tratar siempre de que el empresariado pueda lograr mayor beneficio (por más que lo llame mantenimiento de la tasa de beneficios) sin límites y se estudia además que el obrero debe ganar lo menos posible con el límite puesto de la subsistencia, pero puesto para que no se sobre extienda la resistencia, ya que sin ningún problema si lo pueden bajar a este límite, lo hacen. Muchas veces la clase empresarial logra esto pactando con la clase dirigente gremial. Los obreros enceguecidos con dádivas ven como sus dirigentes gremiales que parecen vitalicios se enriquece mientras que ellos van camino al sueldo paupérrimo.

Los beneficiados

Aquél que logra acumular riqueza en el final del ciclo, al sobrevenir la crisis acumula inclusive riqueza de otros.
Las empresas se agrupan, se absorben unas a otros, provocando acumulación de riquezas por un lado y empobrecimiento por otro es bipolar. Algunos que fueron empresarios pasan a obreros y algunos obreros pasan a empresarios. Todos estamos incluidos dentro de las probabilidades en un mundo capitalista libre pero la bipolaridad se manifiesta siempre y más claramente en cada crisis.
Se demuestra que cada vez son menos los que manejan las riquezas que mueven la economía.
Repartir la herencia.
Si a lo demostrado en el punto anterior le sumamos que en el mundo actual la clase empresarial, que se está enriqueciendo, aplica lo que se llama planificación de la crianza y solo tiene pocos hijos a quienes dejar la herencia y, la clase obrera, que se están empobreciendo, no aplica lo que es planificar la crianza y generalmente los hijos vienen, para decirlo benévolamente, a la buena de Dios. Todo se complica más aun.

Propuesta.

Queda en manos de Dios, fuente de toda razón y justicia.
Creo y digo: en manos de Dios, no de lo religiosos y, menos aun de los que considero no deberían ser tan poderosos económicamente.

FIN.

Ingeniero Edgardo García.